jueves, 26 de febrero de 2015

8 cosas que pocos dueños de bares y clubes con música en vivo hacen por sus clientes....



Hace unos días me pidieron visitar un espacio para analizar su viabilidad para hacer música en vivo. Cualquiera pensaría que sólo se trata de poner un pequeño escenario y que agregando un equipo de sonido decente la situación está bajo control. La primer pregunta que le hice al dueño fue ¿Qué tipo de clientes quieres tener?... Su respuesta me dejó helado... "gente que pague".

De entrada ya sería difícil explicar muchas cosas necesarias para su espacio de música en vivo. Desde hace tiempo he querido abordar un tema así de espinoso y duro porque sé que no será bien recibido por todos.

Decidí escribir este post con la finalidad de aportar un elemento clave para la experiencia del cliente en un lugar en vivo. La gran mayoría de los bares culpa al músico o al ingeniero en audio de la experiencia del cliente. ¿Pero realmente el dueño sabe lo que tiene en sus manos como negocio?

1.- Espacio real: Muchos dueños de clubes tienen en mente crear pequeñas "The Cavern" en espacios apretados con poca ventilación y muchos clientes. Se limitan a vender cerveza por montones y se olvidan de lo primordial... El Cliente. Esto merece un post totalmente aparte porque tiene que ver con modelo de negocio e interpretación del nicho de mercado. En resumidas cuentas, no todos los bares consiguen esa intimidad entre el cliente, el consumo y la música en vivo. Muchos se quejan del "escenario" de 3 por 2 metros de fondo que han "pensado" para los músicos. Esto es una señal directa y concluyente de un empresario improvisado que no conoce nada sobre experiencia del cliente.

2.- Equipo barato e insuficiente: Todo va de la mano. Si no vendes un determinado número de cervezas, el negocio sufre. Se quejan del costo de mantenimiento de equipo y prefieren que la banda lleve su propio set porque se cansaron de mandar reenconar el bello par de bocinas "Mitzu" que compraron hace 3 años. Nunca se asesoran de lo que significa costo-durabilidad. No hay preocupación por tener un ingeniero base porque "hay muchos por ahí" o que la banda traiga el suyo. Mal audio es pérdida de ventas, porque el cliente no vive su experiencia realmente. Los clubes y bares basan ahora más que nunca su reputación por recomendación.

3.- Promoción insuficiente de los eventos: Cacarear el espectáculo una semana antes no sirve. No da cabida a la planeación al cliente. Si mi banda favorita está en la zona y me entero que es pasado mañana, replantear mi salida con mi novia y cancelar la comida con la suegra es imposible. Crear calendarios mensuales es fundamental para conseguir una continuidad de clientela. Siempre va a variar el número de visitantes, pero por lo menos debes buscar una meta real para fechas importantes. Planeación es la clave.

4.- Iniciar los eventos de forma temprana: Anunciar a las bandas a partir de las 8 pm y retenerlas hasta las 10 para iniciar la música en vivo, es síntoma de un negocio mal administrado y contemplado. El argumento siempre es "para que se llene". ¿Usted esperaría a que le atendieran de una muela hasta que se llene un consultorio? Si me contesta que es diferente, le aseguro que ambos cubren algo común... UNA NECESIDAD.  En un consultorio las necesidades pueden ser dolor, prevención, atención, corrección dental. En un bar puede ser diversión, convivencia, relajamiento, seguir a la banda. Le ha preguntado a sus clientes con honestidad, ¿porqué visita su bar regularmente?.  No se sorprenda si en ningún motivo aparece su negocio como la causa principal.

5.-Número excesivo de bandas: ¡Algunos bares ofrecen hasta 10 bandas en vivo en una sola noche!... Los tiempos de cambio entre bandas resultan mortales. La banda no tiene tiempo suficiente de preparar su sonido con un tiempo tan restringido. Las pausas no ayudan al consumo. La rotación se mantiene cerrada y la gente llega a escuchar bandas comprando una sola cerveza para toda la noche. ¿Le suena eso a negocio?... Dos bandas pueden hacer un mejor trabajo y conseguir una mejor fuente de consumo que 10 bandas de garage. ¿Quieres tener más días abiertos? Distribuye tus 10 mejores bandas en distintos días de la semana.

6.- Bandas vende boletos: Hasta el cansancio y agotamiento lo repetiré cuanto sea necesario: LAS BANDAS NO SIRVEN PARA VENDER BOLETOS. Su trabajo es practicar, mejorar su técnica, su música y su interpretación para ofrecer entretenimiento y su visión artística a una audiencia cautiva entre 4 paredes. Los bares que usan los boletos como medio de ingreso definitivamente no tienen claro para que tienen un negocio de este tipo. Hay mil maneras de generar ingresos en conjunto con la banda.

7.- Volumen dentro de los estándares: Para el dueño, altos volúmenes representa menos interacción entre clientes y vender más tragos. Pero de nada te sirve si siempre dependes del volumen de venta. La fatiga auditiva causa dolor de cabeza, nauseas, aturdimiento. ¡LA GENTE DEJA DE CONSUMIR PORQUE PIENSA QUE YA SE LE PASARON LAS CERVEZAS¡. Añade elementos a tu menú que permitan la permanencia de consumo. Menos sacaborrachos y más atención al cliente.

8.- Haz negocios con las bandas, no consumidores: Te parecerá barato negociar con la banda tocadas por tragos para evitar pagar efectivo. Ahora imagina a un cliente negociar contigo pagar la cuenta una parte en efectivo y la otra con varias cajas de bujías porque eso es lo que vende. ¿Ilógico? 

Asesórate para que puedas reconocer el potencial de aquellas bandas que podrían aportar algo a tu lugar. Imagínate que una banda consiga cierto éxito con el paso de los años y hablen de tí como un verdadero impulsor de su propuesta. ¿O prefieres aparecer en su libro de memorias como el hoyo de mala muerte del que tuvieron que emigrar a uno mejor donde las oportunidades se abrieron por su respaldo?... Ahí está la diferencia entre "The Cavern" y tu negocio.

Conclusión

La reputación de un lugar ahora es medible en múltiples sentidos. Los sitios web para recomendaciones son cada vez más populares y distribuíbles vía móviles. De boca en boca se van cubriendo nuevos lugares de gloria y otros van sacando a relucir sus fallas que los han condenado. 

En México está por demás decir que las fallas de un negocio a ciegas, se convierte en argumento para pagar menos a las bandas a pesar de su esfuerzo. Imagínense a un paciente decirle a su doctor que no le gustó la operación de apendicitis que le hizo porque le resultó dolorosa e incómoda. La gran pregunta sería ¿Tiene la culpa el doctor de que el paciente hubiera consumido irritantes con un mal manejo de estabilidad psicológica y personal?

Un lugar para la música en vivo es maravilloso, porque simplemente se integra de otras industrias que significan oportunidades claras de negocio. Las bandas son portavoces ante personas que pueden iniciar no sólo el consumo sino la reputación adecuada para tu negocio. 

El cliente puede comprar el disco de esta banda y visitar regularmente un bar o club donde por 6 horas no se preocupó por la cuenta. El disfrute personal estuvo a su alcance y al día siguiente recordará la experiencia posteándola en Facebook, sacando imágenes de tu bar y no sólo 20 selfies de ellos en diversas etapas de embriaguez.

No te limites a vender cervezas y alcohol como tu negocio. Piensa en la experiencia del cliente. ¿Cómo te gustaría que te trataran a tí en un bar?,¿Crees que la amabilidad y atención es costosa?
Mejores lugares significan mejores bandas, mejores negocios, mejores clientes, mejores ingresos. 
Abre tu panorama y saca a tu negocio de estos vicios. Sobre todo, piensa en que tipo de cliente quieres tener...



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